Así lo estableció el Ministerio de Salud mediante una resolución suprema. Se espera que la medida disminuya la cantidad de fumadores
En un plazo de seis meses, los envases, publicidad de cigarrillos y otros productos hechos con tabaco deberán consignar en el 50% del espacio de la cara principal del artículo, una advertencia sanitaria que alerte a los usuarios sobre las enfermedades que pueden originarse por causa de su consumo.
Así lo estableció el Ministerio de Salud (Minsa) mediante una resolución ministerial en la que se aprueba la "Normativa Grafica para el uso y aplicación de las advertencias sanitarias en envases, publicidad de cigarrillos y de otros productos hechos con tabaco" publicada en el boletín de normas legales del diario oficial "El Peruano".
La normativa fue elaborada en cumplimiento de la Ley 25708 y estuvo en consulta durante diez días, tiempo en el cual las empresas tabacaleras y los ciudadanos en general enviaron sus observaciones y recomendaciones.
A nivel mundial son 147 los países que han suscrito el convenio macro para el control del tabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por ejemplo, tras la publicación de las advertencias en las cajetillas de cigarros, en Canadá el 27% de los fumadores realizó esta práctica en menor cantidad dentro de sus casas, según informó el Minsa.
En tanto, el 58% de los fumadores pensó más acerca de los efectos del tabaquismo sobre la salud debido a las advertencias y el 44% dijo que las advertencias habían aumentado sus motivaciones para dejar de fumar.
En Brasil el 54% de los fumadores cambió su opinión sobre las consecuencias del tabaquismo para la salud y el 67% afirmó que las advertencias en las cajetillas hicieron que ellos desearan dejar de fumar.
Daños a corto y largo plazo
El Minsa recordó que está demostrado que el humo del cigarro daña a las personas que se encuentran alrededor (fumadores pasivos).
Asimismo, el consumo de tabaco causa no solo irritación de las vías respiratorias, tos, pérdida del apetito, pulso rápido y disminución de la temperatura corporal, pues a largo plazo puede generar bronquitis crónica, enfermedad coronaria, infarto agudo del miocardio, ulceras gástricas, cáncer en boca, lengua, pulmones, etc.
En un plazo de seis meses, los envases, publicidad de cigarrillos y otros productos hechos con tabaco deberán consignar en el 50% del espacio de la cara principal del artículo, una advertencia sanitaria que alerte a los usuarios sobre las enfermedades que pueden originarse por causa de su consumo.
Así lo estableció el Ministerio de Salud (Minsa) mediante una resolución ministerial en la que se aprueba la "Normativa Grafica para el uso y aplicación de las advertencias sanitarias en envases, publicidad de cigarrillos y de otros productos hechos con tabaco" publicada en el boletín de normas legales del diario oficial "El Peruano".
La normativa fue elaborada en cumplimiento de la Ley 25708 y estuvo en consulta durante diez días, tiempo en el cual las empresas tabacaleras y los ciudadanos en general enviaron sus observaciones y recomendaciones.
A nivel mundial son 147 los países que han suscrito el convenio macro para el control del tabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por ejemplo, tras la publicación de las advertencias en las cajetillas de cigarros, en Canadá el 27% de los fumadores realizó esta práctica en menor cantidad dentro de sus casas, según informó el Minsa.
En tanto, el 58% de los fumadores pensó más acerca de los efectos del tabaquismo sobre la salud debido a las advertencias y el 44% dijo que las advertencias habían aumentado sus motivaciones para dejar de fumar.
En Brasil el 54% de los fumadores cambió su opinión sobre las consecuencias del tabaquismo para la salud y el 67% afirmó que las advertencias en las cajetillas hicieron que ellos desearan dejar de fumar.
Daños a corto y largo plazo
El Minsa recordó que está demostrado que el humo del cigarro daña a las personas que se encuentran alrededor (fumadores pasivos).
Asimismo, el consumo de tabaco causa no solo irritación de las vías respiratorias, tos, pérdida del apetito, pulso rápido y disminución de la temperatura corporal, pues a largo plazo puede generar bronquitis crónica, enfermedad coronaria, infarto agudo del miocardio, ulceras gástricas, cáncer en boca, lengua, pulmones, etc.
Fuente :EL COMERCIO
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